lunes, 30 de marzo de 2020

Chato Galante, luchador contra la injusticia


   “En la madrugada del domingo 29 ha fallecido en el hospital La Paz Chato Galante, conocido luchador antifranquista, activista ecologista y social y, en los últimos años, referente en la reivindicación de la memoria democrática y la justicia contra los crímenes franquistas.” 
   Así lo ha anunciado el comunicado de prensa de la asociación La comuna, presxs del franquismo.

   La conmoción provocada por la noticia de su muerte ha convertido este día en uno de los más tristes de los diez años de historia de nuestro Grupo Escolar de Amnistía Internacional.
   Nos ha conmovido tanto porque tuvimos la suerte de conocer a Chato cuando lo invitamos al instituto hace años, en el curso 2014-15. En aquella visita pudimos comprobar que era un hombre bueno que, siendo muy joven, había sufrido injustamente la crueldad de los verdugos de la dictadura franquista. Por eso, desde entonces no lo hemos olvidado. Su nombre está presente siempre que tratamos el tema del franquismo: este diciembre, al proyectar la película “El silencio de otros”, también cuando recibimos el premio Vicente Ferrer… En todos los momentos en que mencionamos las actividades que más han conmovido al Grupo, que más nos han llegado y que querríamos repetir, sale el nombre de Chato.

   Lo evoca Isidro, el profesor que recibió a Chato Galante en aquella ocasión: 
      “Le recuerdo preparando la charla y las diapositivas con un especial interés en la sala de profesores del instituto.
      La charla trataba sobre la tortura del final de la Dictadura Franquista, hace ya cinco años.
      Era un hombre de espíritu joven y luchador que quería transmitir la importancia de la defensa de derechos humanos, no hace tanto y no tan lejos.
       Recuerdo que aquella charla les llegó mucho a aquellos alumnos, y prueba de esto fue el enorme silencio de los cerca de ciento cincuenta que lo escucharon durante casi dos horas.
      Nos relató con serenidad su dura experiencia como víctima de la tortura, pero tal vez lo que más le torturaba era la impunidad con la que vivían los torturadores, pues su casa estaba a unos metros de quien le torturó en los años setenta.
      En recuerdo de un luchador incansable por causas justas, descanse en paz.

   Hemos rescatado lo que escribíamos en este mismo blog al hacer memoria de las actividades de aquel curso:
       Chato llegó a nosotros a través de un artículo de la revista de Amnistía Internacional, en el que hablaba sobre su experiencia durante la dictadura. A raíz de este artículo decidimos contactar con él para planificar una charla coloquio, ya que por ese entonces estábamos tratando la campaña de “Stop Tortura” propuesta por Red de Escuelas.
      Dos miembros del Grupo plantearon a Chato cuestiones sobre su experiencia; más tarde se dio lugar al turno de preguntas. Después comimos con Chato. Fue un encuentro emocionante en que nos impresionó la impunidad de los torturadores frente a la indefensión de los torturados, tras décadas de "justicia" democrática.”

   Nos escribe en Instagram ahora mismo uno de los exalumnos que asistió a aquella charla: “Siempre le recordaremos”.
   Su pérdida ha afectado a quienes asistimos aquel día, e incluso a miembros del Grupo Escolar que, por ser más niños, no estuvieron allí, ni pudieron conocerlo, pero de escuchar cómo siempre hemos hablado de él, de ver en documentales y en la televisión su papel en la querella argentina, ya es como si lo conocieran, y tenían la esperanza de que pudiera asistir a un acto de reencuentro con todas aquellas personas que hicieron más grande el grupo, que participaron en coloquios, que nos conmovieron.
   No va a poder ser. El coronavirus ha terminado con la lucha de esta gran persona por la verdad, la justicia y la reparación para quienes habían padecido como él, pero  nos deja su huella de tesón frente a la injusticia. Como dice Carlos, otro profesor del Grupo, “sigue con nosotros a través de nuestro compromiso con esos valores”.
   Nuestras condolencias a su familia, a sus amigos y a los compañeros en esa lucha.
   Descanse en paz Chato Galante.


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