Aceptaron gustosos la propuesta, y prepararon una sesión que resultó muy interesante y provechosa, como puede verse en lo que describimos a continuación:
Comenzaron proyectando el vídeo "Contrastes", de Ugur Gallenkus, que muestra imágenes contrapuestas de situaciones del mundo acomodado y de otras partes de la tierra en estado de guerra o de necesidad. Estremece cómo este artista turco compone la imagen, de modo que el cerebro tarda un segundo en encajar que lo que muestra cada fotograma no es una misma foto, sino dos que evidencian con fuerza la injusticia. Es un buen punto de partida para valorar lo que significa vivir en una parte del mundo u otra, y ya hubo intervenciones comentándolo.
A continuación, tras ofrecer un nuevo vídeo, que ilustra con sencillez y agilidad cómo surgió la Declaración Universal de los Derechos Humanos, pasaron a explicar qué son estos y cómo se agrupan.
Nos plantearon luego acciones cotidianas poniéndolas en relación con los correspondientes Derechos Humanos, y nos pidieron que pensáramos en qué variaría nuestra vida si careciéramos de alguno de los Derechos. Es una práctica tomada de un material de Amnistía Internacional.
Una vez efectuada esa reflexión, presentaron un panorama de situaciones de vulneración de Derechos que se dan en nuestro propio país: en relación con las personas refugiadas, con la venta de armas, con la violencia contra la mujer, el restringido derecho de manifestación o los desahucios, y presentaron campañas relacionadas con todo ello que hemos venido conociendo a lo largo de los años de funcionamiento de nuestro Grupo Escolar:
La segunda parte de su intervención consistió en un taller que reproducía la técnica que habíamos aprendido en el reciente Encuentro de Red de Escuelas en el IES Herrera Oria:
Nos distribuyeron en cuatro equipos heterogéneos, para que trabajáramos sobre una imagen que nos dieron en fotocopia y nos explicaron la tarea que teníamos que realizar: observar la imagen adjudicada y crear una historia en relación con la fotografía, a la vez que considerábamos qué Derechos Humanos resultaban vulnerados.
Cada equipo se metió en situación rápidamente, y se consiguió un animado debate, que culminó en el relato requerido. Debido a que no dio tiempo a poner en común lo que cada grupo había conseguido, nuestros tres formadores pidieron que se incluyera como punto del orden del día del viernes siguiente la continuación de su taller, lo que aceptamos con gusto.
En esa segunda sesión, se leyeron en voz alta los cuatro relatos y se valoró muy positivamente cómo habían llevado el taller, por su amenidad y por lo útil que había sido para conocer un poco más los Derechos Humanos que, como miembros del Grupo Escolar de Amnistía Internacional, deseamos defender.
Al terminar la actividad, Jara propuso que se publicaran en el blog los relatos creados, y pareció una idea excelente, por lo que procederemos a ello en sucesivas entradas.
No nos queda más que felicitar a estos tres espléndidos formadores por su trabajo por la mejora del Grupo Escolar y animarlos a que sigan en la vía de humanidad que emprendieron desde el momento en que entraron en el Instituto hace ya cinco cursos.
